A veces tengo ganas de matarme. Soy de esas personas que se preocupan ya en exceso por los demás, y a veces se perjudican para evitar hacer sentir mal al otro. Decido muchas veces en función a los demás y no a lo que quiero hacer. Pero creo que llega un momento en el que se me hace imposible no tener las ganas de gritar ¡HOLA, DATE BOLA, ACÁ, SOS VOS! No hablo ni siquiera de convertirme de un momento al otro en egoísta. Pero respeto mucho los tiempos. Necesito que las condiciones siempre sean las "perfectas" para poder jugarme por algo ¿Pero, qué son las condiciones perfectas? Si. Está mal. No arriesgo. Pero creo que pasa porque me conozco, y sé (por cosas que me pasaron) que si hago algo en falso, después me carcome la culpa. Entonces prefiero tomarme todo el tiempo del mundo antes de hacer algo. Y así y todo siento tanta adrenalina por cada cosa o paso que doy. Pero para todo ámbito de la vida. Soy perfeccionista, no sé si al extremo de frustrarme por los errores que tengo. Pero no me gusta equivocarme, entonces digo: si se supone que uno aprende de los errores, ¿cómo voy a aprender yo? Me gusta ser una persona "estable", no dar sorpresas cada dos por tres. Y a veces no entiendo que la gente no es igual ni parecida a mi, entonces muchas veces me siento mal, porque no puedo entender cómo hacen ciertas cosas, o cómo reaccionan así. Capaz sin tener en cuenta lo que le pueda estar pasando a la otra persona. Debería empezar a pensar un poco más en mi, jugarme por lo que siento y me pasa, sin pensar en los demás antes que en mi. Al fin y al cabo si esas personas me quieren, van a aceptarme así y me van a apoyar en las decisiones que tome. No digo de ser una de esas personas impulsivas que se llevan el mundo por delante, pero sí bajar un cambio y aceptar que soy así y que hay cosas que me pueden pasar. Pero creo que lo que me pasa es un poco también por lo que los demás piensan que soy y me lo hacen saber. Seguramente yo sienta tanta presión antes de rendir porque siempre fui "a la que le va bien" y no por eso tengo que aprobar todos los exámenes que tenga. Tampoco tengo que bancarme que me digan "ahora que está Brune saquémonos la foto familiar", o sea, falto una vez y ya me tilda de no venís nunca. No me tendrían que importar las cosas que dicen los demás o el concepto que tienen los demás de mi, pero no puedo. Por eso es que siento tanta culpa, por miedo a que se me tilde de algo que no soy, por una vez que me juego a algo. Está muy mal, porque en definitiva mi vida es construída por mi, y yo soy la que la estoy viviendo. Los demás si hablan, y no hablan con certeza, sean cercanos o no tengan nada que ver conmigo, evidentemente no me conocen. Entonces, ¿por qué preocuparme por gente que habla y no me conoce?
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