Viste que dicen que de los errores uno aprende. Debo ser la excepción, calculo. Darme (y darle/s) la cabeza contra la pared ochocientas mil veces pensando siempre que va a ser diferente.
¿Por qué uno lastima cuando uno aprende? y ¿ de qué sirve entonces equivocarse con alguien que te resulta importante y lastimarla si cuando uno "ya" aprende no hay vuelta atrás con lo mal que le hicimos? Onda, no es borrón y cuenta nueva. Cada error queda, y marca. A veces más, a veces menos, pero en definitiva -así como las buenas cosas- los errores van definiendo a la persona (al menos lo que ven que sos). Queda en uno aprender de lo que hizo, o volver a caer dejándose llevar por lo atractivo que es equivocarse. No creo en las segundas oportunidades. No son como quisiéramos. Por eso uno cuando habla de segundas oportunidades, no está hablando de eso, porque nada vuelve a ser como antes. Y no por la culpa de alguien, sino que todo cambia todo el tiempo.
Como quisiera aprender sin lastimar.
domingo, 29 de agosto de 2010
domingo, 22 de agosto de 2010
lunes, 16 de agosto de 2010
jueves, 12 de agosto de 2010
miércoles, 11 de agosto de 2010
martes, 10 de agosto de 2010
Sin... ¿y?
Hoy estoy tranquila. Tengo ganas que me vengan unas ganas enceguecedoras de eso y seguir más allá de todo, como alguna vez me sentí, busco sentirme plena. A pesar de que traiga contras, pero sentirse plena es una pro mucho más grande que la contra. Me parece que voy a hacer como dice Pity, desconectarme por un rato y dejar que a mi destino lo maneje la suerte.
domingo, 8 de agosto de 2010
¿Si quiero puedo?
Siempre pensé eso. Pero hoy no creo que las cosas sean así. Uno puede proponerse metas, y decir "querer" es poner voluntad, pero voluntad en serio. Pero con las cosas que sentimos, ¿querer es poder?
Quiero sentir cosas que no siento, quiero no sentir cosas que siento, quiero tomar decisiones que no puedo decidir, quiero saber qué me pasa, quiero saber qué es lo mejor para mi, quiero que alguien venga y me diga: "hacé esto que vas a triunfar", quiero estar contenta con cada cosa que decido y hago, quiero aprender de mis errores, quiero no darme la cabeza 30 millones de veces contra la pared, quiero ser menos exigente, quiero dejar de vivir en preguntas y dejar de dudar siempre, quiero sentir eso.
Quiero sentir cosas que no siento, quiero no sentir cosas que siento, quiero tomar decisiones que no puedo decidir, quiero saber qué me pasa, quiero saber qué es lo mejor para mi, quiero que alguien venga y me diga: "hacé esto que vas a triunfar", quiero estar contenta con cada cosa que decido y hago, quiero aprender de mis errores, quiero no darme la cabeza 30 millones de veces contra la pared, quiero ser menos exigente, quiero dejar de vivir en preguntas y dejar de dudar siempre, quiero sentir eso.
martes, 3 de agosto de 2010
Anoche soñé
Hice una mezcla entre mi villano favorito, la facu, quinto año y una foto que vi.
Tengo flashes, ni bien me desperté me lo acordaba todo, pero ahora sólo me acuerdo lo que más me causó.
Estábamos como en un teatro, había muchísima gente, todos pibes y pibas, se ve que estábamos preparando un super show con varios sketchs y coreografías. Entonces, mientras esperábamos nuestro turno, con las chicas abrimos el cuaderno de quinto año y empezamos a leerlo.
Me acuerdo que en una parte decía algo mío con respecto a alguien, y ese alguien estaba dando vueltas por ahí, o sea que en el sueño me volví bordo pensando que iba a escuchar. Después me acuerdo de mati tocando la guitarra en las escaleras. Y había algo que me causaba mucha gracia, era algo ridículo. Al punto de sólo acordarme del sueño que estaba tentada y no podía parar de reírme. Y me desperté pensando que era una tarada: ¿cómo te vas a reir así Brunella, aunque fuese un sueño?
Capaz necesite eso, reirme un poco más, y no darle tanta bola a los nervios.
Tengo flashes, ni bien me desperté me lo acordaba todo, pero ahora sólo me acuerdo lo que más me causó.
Estábamos como en un teatro, había muchísima gente, todos pibes y pibas, se ve que estábamos preparando un super show con varios sketchs y coreografías. Entonces, mientras esperábamos nuestro turno, con las chicas abrimos el cuaderno de quinto año y empezamos a leerlo.
Me acuerdo que en una parte decía algo mío con respecto a alguien, y ese alguien estaba dando vueltas por ahí, o sea que en el sueño me volví bordo pensando que iba a escuchar. Después me acuerdo de mati tocando la guitarra en las escaleras. Y había algo que me causaba mucha gracia, era algo ridículo. Al punto de sólo acordarme del sueño que estaba tentada y no podía parar de reírme. Y me desperté pensando que era una tarada: ¿cómo te vas a reir así Brunella, aunque fuese un sueño?
Capaz necesite eso, reirme un poco más, y no darle tanta bola a los nervios.
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